Edición especial | Edición 17 | 20 agosto, 2025

Una invitación a mirar de nuevo, a mirar mejor

¿Cuánto de huella y cuánto de interpretación hay en una pintura que retrata un momento histórico? ¿Cómo tratarla, estudiarla, dialogar con ella? A partir de lo propuesto en la nota “Ocupación militar del Río Negro”, Dussel, ensaya una manera, de atender a esos interrogantes.

El análisis que ofrece Javier Trímboli (2018) de la pintura de Juan Manuel Blanes, “Ocupación militar del Río Negro por el Ejército Nacional el 25 de mayo de 1879”, conocido también como “La Conquista del Desierto”, da muchas pistas sobre cómo mirar este cuadro, pero principalmente sobre su manera de presentar la historia.

Ocupación militar del Río Negro en la expedición al mando del General Julio A. Roca. Juan Manuel Blanes, 1889. Óleo sobre tela.

Empiezo por lo primero: el valor de la pintura y, más en general, de las imágenes como documentos históricos. Javier lo dice muy claramente: “un cuadro es sobre todo una interpretación de lo real, no es una huella de este”. Lo que el cuadro muestra es una puesta en escena, en este caso un discurso de Estado sobre la conquista territorial y la derrota de los pueblos indígenas. Pero saber que es parte de un discurso de Estado no nos exime de ir despacio en el análisis; no hay que dar por sentado que dice lo que creemos que dice, sino estudiarlo.

Javier empieza por la materialidad de la pintura. El cuadro tiene un carácter monumental, una dimensión tan grande que no puede pasar por la puerta del museo donde está alojado –entre otras cosas, porque en refacciones recientes no tomaron bien las medidas–. En esos breves comentarios, el análisis de Javier lo pone en la historia: no solamente fue un encargo de Estado, sino que también ocupa un espacio privilegiado en un dispositivo estatal como es el Museo Histórico Nacional. Trímboli analiza la disposición del cuadro, cómo y dónde se emplaza a los participantes: importa ver quiénes ocupan el centro de la escena, a qué altura, con qué tamaño, hacia dónde miran, qué gestos hacen, qué pide o qué espera de quien lo mira. Los que van a caballo, los del ejército nacional, ocupan el centro, mientras que en los márgenes se sitúan los científicos que acompañan a la expedición y los indígenas cabizbajos. La figura de la cautiva con un hijo mestizo en brazos es un índice de lo que se viene a rescatar, aunque su lugar marginal y a pie no augura nada auspicioso para su futuro.

Pozzo, A. (1879). Puan, coraceros en el cuartel. (Expedición al Río Negro • Antonio Pozzo – Museo Histórico Regional Choele Choel)

Trímboli también plantea la diferencia entre la pintura y la cámara fotográfica. Sabemos, por los trabajos de Laura Malosetti (2001) y Roberto Amigo (1994), que Blanes se basó en fotografías del ejército y estudió al detalle los uniformes, las espuelas y el armamento. Pero el análisis detallado marca la diferencia: en esa ocupación, que el cuadro supuestamente escenifica, no estaban algunos de los oficiales que se retratan; fueron incluidos en el cuadro a pedido de Roca. Es interesante que Javier trae otras fotos, las de Antonio Pozzo –quien acompañó a la expedición–, que sí muestran escenas más cruentas, como lo plantea el estudio de Julio Vezub (2002). Javier parece estar diciéndonos: miren este cuadro y pónganlo al lado de otras imágenes; pregúntense qué se retrata y cómo; vean qué incluye y qué deja afuera; contrástenlo con otros documentos visuales y verbales y vayan más allá de la primera lectura para encontrar otras líneas de análisis, para acercarse con otra profundidad, sin abandonar la superficie del cuadro pero abriéndola en distintas direcciones.

 

Pozzo, A. (1879). Los Indios de Linares en el Chichinal.

Hay una segunda línea de análisis que puede verse en este texto y es cómo Javier presenta la historia. Me animo a decir que lo hace como una intriga, poniendo a discusión lo que sabemos, lo que creemos saber y lo que podemos saber si miramos con más cuidado y más conocimiento. Se pregunta si hay misterio o no, si es todo tan evidente, y me parece que la respuesta que da en cada giro analítico que toma es que no. Este cuadro “aporta e impone” una lectura de Estado que es el de la conquista del desierto, “un hecho natural, la realización de algo que ya estaba consagrado, la ocupación de un vacío”: la civilización contra la barbarie, la indefectible, arrolladora victoria del progreso sobre el atraso. Pero lo interesante es analizar cómo lo hace, porque ahí están los indicios de una autoridad política y cultural que se buscó construir en ese momento. Javier nos invita a cuestionar el uso de la fecha del 25 de mayo por la generación del roquismo, que quería presentarse como parte de esa zaga patriótica, aunque con documentos y análisis en mano es poco razonable argumentar que los revolucionarios de 1810 tuvieran las mismas intenciones, ya que necesitaron de las alianzas con los pueblos indígenas para la lucha antiespañola.

En un párrafo que hoy tiene otras resonancias con la discusión de los 30.000 desaparecidos, Trímboli también cuestiona la apelación a los números para dar cuenta de la magnitud de los crímenes, no solamente porque esos son los números de los vencedores y pueden haberlos tergiversado a su antojo, sino porque están fundados en categorías y en una contabilidad que no cuenta ni el dolor ni la diversidad y riqueza de las experiencias y vidas que se perdieron. Al mismo tiempo, nos hace revisar el recorte de este cuadro en el billete de 100 pesos (hoy reducido a un ínfimo valor, pero antes el billete de máxima denominación): ¿por qué se planteó a este cuadro como una escena relevante en el imaginario nacional? Y nos deja planteada la pregunta: ¿será que esta nación se funda en crímenes que todavía no puede mirar ni nombrar de mejor manera, de formas que cuiden la vida y la dignidad de las personas?

Gracias, Javier, por invitarnos a mirar de otro modo este y otros documentos del pasado, y por dejarlos resonar junto a las deudas y heridas del presente.

Referencias

Amigo, R. (1994). Imágenes para una Nación. Juan Manuel Blanes y la pintura de tema histórico en Argentina [ponencia]. XVII Coloquio internacional de Historia del Arte. Arte, Historia e identidad en América: visiones comparativas. Instituto de Investigaciones Estéticas-UNAM, México D.F., México, 315-332.

Malosetti Costa, L. (2001). Los primeros modernos. Arte y sociedad en Buenos Aires a fines del siglo XIX. Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica.

Trímboli, J. (2018). Ocupación militar del Río Negro por el Ejército Nacional el 25 de mayo de 1879… Revista Scholé, n.º 0. Para el Instituto Superior de Estudios Pedagógicos, Ministerio de Educación de la Provincia de Córdoba. Disponible en: https://schole.isep-cba.edu.ar/ocupacion-militar-del-rio-negro-por-el-ejercito-nacional-el-25-de-mayo-de-1879-juan-manuel-blanes/

Vezub, J. E. (2002). Indios y soldados. Las fotografías de Carlos Encina y Edgardo Moreno durante la “Conquista del Desierto”. Buenos Aires: El Elefante Blanco.


Es doctora en Educación por la Universidad de Wisconsin-Madison, magíster en Ciencias Sociales por FLACSO y licenciada en Ciencias de la Educación por la UBA.
Autora de numerosos artículos y libros, sus publicaciones recientes tratan sobre los vínculos entre medios digitales y las escuelas.
Es profesora investigadora del Departamento de Investigaciones Educativas del Cinvestav-IPN, México.