Mostrar como forma de interpelar
Poder hablar abiertamente sobre las comunidades originarias actuales y sus procesos de reemergencia identitaria genera que, en numerosas visitas guiadas, algunos visitantes compartan su experiencia personal de descendencia indígena, recuerden algún familiar lejano o cercano que era aborigen o indio (Figura 5):
¡Yo sé de esto, mi tatarabuelo es aborigen!
(Ficha de evaluación de guía, visita guiada a 5.° grado de la Escuela Oscar Soto López, junio de 2018)
Figura 5 / Ficha de evaluación de guía
Además, algunos les dejan mensajes en el libro de visitantes:
¡Hola Comechingones!
¿Cómo están? ¿hace frío?
¿Cómo viven hoy? ¿Cazan animales?
¿Van al supermercado? ¿Siguen haciendo las vasijas?
Nos gusto la casa cueva y la casa pozo, las lanzas.
Nos gustaría conocerlos.
Somos los niños del Jardín Gabriela Mistral.
Un abrazo y un choque los cinco. 14/06/18
(Libro de visitantes, 2018)
Estos registros son ejemplos de la primera etapa de visibilización de los pueblos originarios en el museo y esboza algunos alcances posibles con los visitantes.
En el 2019, continuamos alimentando los vínculos, visibilizando memorias actualizando los soportes museográficos (Figura 6).
Figura 6 / Memorias
Desde la Dirección y el Área de Educación y Difusión, se establecieron comunicaciones personales con miembros de las comunidades indígenas que participaron en actividades de reconocimiento y visibilización en el museo3. El objetivo fue incorporar sus fotografías en la museografía de hoy y actualizar contenidos. Esta decisión fue consultada y consensuada con las personas que aparecen en las imágenes y la conversación mantenida con ellos nos sirvió para contextualizarla.
A modo de cierre, compartimos una de las cartillas resultantes de dicha conversación, dirigida a los visitantes que vean su fotografía (Figura 7):
Hugo Acevedo, Comunidad Pueblo de la Toma (Córdoba capital):
(…) somos “los comechingones de hoy”. No que somos descendientes si no que somos los de hoy. Porque a pesar de todo lo que deben haber vivido en el pasado quienes vivieron aquí, acá estamos. Lo que pasa es que los conquistadores lo hicieron tan bien. Esos grupos fueron organizados para atacar principalmente a las mujeres. Se las llevaban y las forzaban a abandonar a sus compañeros y a sus hijos. Y a ellos les llevaban luego mujeres blancas. Y como en las comunidades todo refería a las mujeres, toda la base del parentesco venía de las abuelas. Por eso las atacaban. El encomendero violaba a las mujeres y no las dejaban abortar. Porque claro que las mujeres sabían cómo abortar con yuyos que preparaban. Después con la iglesia les impidieron abortar. Todas eran instituciones controladoras y lo que querían era desarmar la comunidad.
(Registro de conversaciones telefónicas, 6 de abril de 2019)Figura 7 / Hugo Acevedo
Algo de ellos
Si bien el museo tiene el objetivo de educar, difundir y actualizar contenidos en relación a las ciencias antropológicas, es importante considerar los procesos de diálogo que involucran a diferentes actores de la comunidad.
Alimentar e incentivar las reflexiones resultantes es una manera de construir significado; teniendo en cuenta que día a día el museo se convierte en una oportunidad de (re)conocerse en la mirada del otro.